Sandúa lleva participando en esta iniciativa desde su nacimiento hace cuatro años, con el objetivo de que los alumnos de último curso universitario desarrollen un proyecto que tenga un enfoque práctico y de aplicación en el mundo laboral real.
Concretamente, los alumnos realizan un estudio de mercado para una empresa navarra en otro país. De esta manera, los estudiantes realizan el último curso de intercambio en el extranjero y al mismo tiempo aprovechan para llevar a cabo allí su proyecto.
En la citada mesa redonda, Laura Sandúa, gerente de Aceites Sandúa, intercambió experiencias con otros representantes de empresas participantes como Daniel Palacio, consejero delegado de Tutti Pasta y Federico Crespo, director general de Europa de Planasa.
Todos ellos valoraron de forma muy positiva los frutos que está generando esta sinergia entre el mundo laboral y el universitario. Los estudios de mercado que los universitarios realizan en los países a los que el programa de intercambio les destina resultan de gran utilidad a las empresas que colaboran en esta iniciativa.
Aunque pertenecen al ámbito universitario, estos trabajos se convierten en un producto real que las empresas desarrollan. Por ello, para los responsables de las compañías es crucial que el alumno se empape de la forma de hacer y de la imagen que la marca posee. “Hay que marcarles las pautas claves, lo que es la filosofía de la empresa. Por eso, es importante tener con ellos una comunicación directa”, explicó Laura Sandúa.
