Ingredientes:
- 4 rodajas de atún fresco
- 400 Gr. de judías verdes finas
- Unos cuantos pimientos verdes pequeños (padrón o guernika)
- 8 patas pequeñas
- Perejil
- Aceite de oliva virgen extra Gran Selección Sandúa
- Salsa de soja
- Sal en escamas
En primer lugar vamos a ocuparnos de las verduras, porque el atún hay que brasearlo en el último momento.
Desechamos los extremos de las judías verdes y las cortamos en juliana de forma que queden finas y las cocemos para que queden al dente. Si dispones de olla rápida y un soporte para cocer al vapor, es una forma cómoda y rápida de preparar la verdura y además esta conserva todo su sabor y color, sin quedar nunca aguada.
Pelamos las patatas de tamaño pequeño y las cocemos igual que las judías verdes.
Reservamos las verduras cocidas.
Coge los pimientos verdes. A la hora de comprarlos puedes escoger el tradicional, aunque tiene menos sabor, o bien optar por los pequeños y más sabrosos del Padrón o Guernika. La diferencia entre ellos es que con los primeros puede que alguno te sorprenda por su excesivo picor, mientras que con los de Guernika te aseguras que esto no va a ocurrir.
Así que tú eliges, picante sorpresa o no.
Si te decantas por el pimiento verde tradicional, retira el rabo y las pepitas y córtalo también en juliana. Con los otros tipos no tienes que hacer esto, son pequeños y se cocinan directamente.
Pasa los pimientos por la plancha con una cucharada de aceite de oliva virgen extra Gran Selección Sandúa. Un puro zumo de aceituna de diferentes variedades que resalta el sabor de los platos y es de gran calidad nutricional.
Inmediatamente después, pasa también por la plancha las judías verdes y las patatas, para darles un último toque.
Ahora coge de una en una las rodajas de atún y vete pasándolas por un plato con aceite de oliva virgen extra Sandúa Gran Selección y por otro con salsa de soja y cocínalas a la plancha que debe de estar muy caliente. Tan sólo unos minutos, lo justo para que la parte externa del atún quede braseada y por dentro permanezca crudo. De esta forma, el atún quedará tierno, sino corre el peligro de estar seco y perderá ese sabor tan intenso que le caracteriza.
También hay quien le gusta untar los bordes de las rodajas de atún en sésamo, lo que le aporta un sabor crujiente a semilas, muy interesante.
Sirve el atún en una fuente acompañado de las patatas, las judías verdes en juliana y los pimientos. Espolvorea un poco de perejil picado y sal en escamas y rocía de nuevo el atún con un poco de aceite de oliva virgen extra crudo y salsa de soja.
También, puedes añadir otras verduras que tengas en casa como tomates, pimiento rojo o cebolla a la plancha. El resultado siempre será delicioso y un manjar más que saludable. Pruébalo!