Más del 80% de todo el aceite de oliva se consume en países productores, aunque hay países no productores como Reino Unido, Alemania, Canadá y Rusia que acumulan el 6% del consumo total.
Estados Unidos constituye el mayor consumidor de aceite de oliva fuera del ámbito mediterráneo, con un 10% del total, y registra crecimientos sostenidos en los últimos años del 22%, explica el vicepresidente ejecutivo de GEA, Juan Vilar, en la nota difundida por los medios de comunicación.
En cuanto a las tendencias internacionales, Juan Vilar señala que, en la última década se han producido incrementos de la demanda muy significativos en naciones como Rusia, Arabia Saudí, Japón o China, que llegan a alcanzar cifras del 200%.
Con estas cifras se concluye que los principales países productores como España, Grecia y Túnez, cuyos excedentes medios al consumo interno superan el millón de toneladas, tienen mercados cada vez más amplios para exportar.
En este sentido, Vilar también habló sobre la situación de Portugal, el país que más ha incrementado su producción porcentual de forma sostenida en los últimos diez años, casi un 75%.